DESTACADASH. MATAMOROSREPORTAJE

El alcohol, la mariguana y la cocaína provocan hechos dramáticos diariamente en Matamoros y el mundo

Por: Lic. Pedro Romero Rivera.

Las drogas son más nociva en adolescentes y el daño es mayor por su vulnerabilidad Matamoros se ha convertido en gran polo de desarrollo, pero también en una gran ciudad contaminada en todos los aspectos, pero en esta ocasión HORIZONTE DE MATAMOROS hablará de algo muy especial la drogadicción, donde lastimosamente vemos día a día que niños de 8 a 10 años, inician a temprana edad la adicción al alcohol, la mariguana (cannabis) y (cocaína) sólo hablaremos de estas en tres partes, ya que como consecuencia estas drogas debido en el mundo impera el alto índice delictivo, principalmente de quienes son adictos a estas drogas.1161618593_f

Alarmante pues que cuando no cuentan con los recursos para adquirirla, inician su carrera delictiva asaltando, atracando y ocasiones hasta matar a seres inocentes con tal de quitarles unos centavos para ellos saciar su apetito de alguna de estas drogas en ocasiones sus propias familias las agreden, apreciable lector, si usted duda de todo este daño enorme a nuestra ciudad acuda a varios sectores de la ciudad a partir de las 7:00 de la noche, muy lamentable pues aparecen por doquier niños con botes de resistol, piedra (crak) droga que les es vendida por personas sin escrúpulos, por lo cual los jovencitos para obtenerla se ven obligados a delinquir sin importarles las graves consecuencias a que se someten e involucran a sus familiares, dialogué con varios alcohólicos y para ellos el mundo actual no les interesa, les interesa principalmente estar rodeados alcohol y nadamás, ya no existe sed o apetito de otra cosa que no sea el alcohol, no saben de elecciones de nuevos gobiernos, sólo desean tranquilizar su ansiedad, con ellos definitivamente no se contará en estas elecciones.

images (1)

Pero más grave es que las autoridades hacen caso omiso a ello y de continuar con este crecimiento pronto Matamoros estará convertida en el refugio de la “Mara Salvatrucha” entre otros grupos delictivos que imperan en la actualidad y podrán dominar grandes espacios territoriales de nuestra ciudad, como ya lo están haciendo mafias bien organizadas que imperan por doquier en cualquier lugar del mundo y de nuestra ciudad.

Lo triste también es que estos jovencitos y adultos no saben el daño irreparable que hacen a su organismo al consumir estas sustancias tóxicas, hablaremos exclusivamente del alcohol una droga legal y recientemente la legalidad de la mariguana, pero si antes de que se legalizara ha convertido en guiñapos humanos a muchos niños, jóvenes y adultos, que se han quedado como piltrafas humanas luego de haber pertenecido a grupos sociales importantes.

Las drogas se pueden clasificar en legales e ilegales; entre las primeras se incluyen alcohol, tabaco (con algunas restricciones legales), los fármacos de prescripción médica, ciertos disolventes de uso doméstico o industrial; y el resto de ellas son ilegales.

1161618593_fLos depresores (alcohol, sedantes, narcóticos y ansiolíticos, cannabis, así como disolventes volátiles) reprimen todas las estructuras presinápticas neuronales con la consecuente disminución de la cantidad de neurotransmisor liberado por el impulso nervioso, lo cual produce además una disminución de la función de los respectivos receptores postsinápticos. El alcohol al igual que otros depresores como los barbitúricos y las benzodiacepinas produce una estimulación de la transmisión inhibitoria.

El grupo de los narcóticos incluye al opio, morfina, heroína, meperidina, codeína, difenoxilato, fentanyl, nalbufina, propoxifeno y la metadona.

Los estimulantes o simpaticomiméticos (cocaína, anfetaminas y metanfetaminas, alucinógenos, y estimulantes menores donde se clasifica a las xantinas) ejercen un bloqueo sobre la inhibición, o una excitación de las neuronas en forma directa. Sus mecanismos de acción son variados y pueden explicarse por afectación fisiológica; por ejemplo, aumento de la despolarización neuronal, incremento de la cantidad de neurotransmisores disponibles, alargamiento de la acción de los neurotransmisores, debilitamiento de la membrana neuronal o reducción del tiempo de recuperación sináptica.

EL ALCOHOL

El etanol es una droga legal de consumo muy ampliamente difundido en el planeta, que se encuentra contenida en las bebidas alcohólicas. Como producto de uso médico el etanol es utilizado como antiséptico externo de baja potencia, por lo que no se encuentra clasificado por la Ley General de Salud como fármaco.

Habitualmente es la sustancia consumida por los pacientes adictos, como sustancia de inicio de su dependencia o bien la combinan esperando alcanzar un refuerzo de los efectos de otras sustancias.

El alcohol se obtiene de la fermentación y destilación de diversos granos, frutos y plantas, y se encuentra contenido en diferentes proporciones en las bebidas alcohólicas. La mayor parte de los vinos de mesa contienen 10-12%. La cerveza contiene entre 4-6%, y los vinos fuertes y destilados de granos y agave poseen concentraciones que varían del 20-60% de alcohol.

El alcohol actúa como un agente perturbador inespecífico de la membrana neuronal alterando tanto su permeabilidad como las propiedades de sus componentes. Algunos de los efectos bioquímicos y conductuales causados por el alcohol, pueden deberse al incremento de la transmisión inhibitoria, probablemente mediada por los receptores GABA. Esta potenciación de los efectos GABAérgicos podría deberse a un  aumento en el paso de los iones cloruro cargados negativamente, hacia el interior de la célula. El etanol también afecta la transmisión de glicina, el cual es un importante neurotransmisor inhibidor. Tanto la serotonina como la dopamina y noradrenalina,  parecen tener relación con la capacidad reforzadora del etanol en el mantenimiento de la conducta de beber.

40692

El alcohol se absorbe rápidamente por el tubo digestivo a nivel del estómago, e intestino. La absorción completa del alcohol puede requerir de 2-6 horas o más, dependiendo del volumen y concentración de la sustancia,  presencia de alimento en el estómago y tiempo en el que la bebida se ha ingerido, entre otros factores.

El hígado es el lugar donde predominantemente se efectúa su oxidación, aunque órganos tales como el corazón y el estómago pueden metabolizar también el producto. Entre 90-98% del etanol ingerido es oxidado y metabolizado en el cuerpo, el resto se excreta en forma inalterada.

Los efectos tóxicos del alcohol mantienen relación con las concentraciones de la sustancia en la sangre.. Cuando las concentraciones alcanzan los 30 mg/100 ml pocos son los efectos que se observan en las personas que no han desarrollado aún tolerancia al etanol. A los 50 mg/100 ml las respuestas y reacciones se lentifican y los procesos mentales integrativos comienzan a alterarse. A una concentración de entre 100-150 mg/100 ml la mayor parte de las personas muestran signos evidentes de intoxicación.  Si la ingestión continúa, las funciones físicas y congnitivas se alteran, pudiendo llegar al deceso tras el estado de coma.

El consumo continuado de etanol genera tolerancia. Ésta se produce por el desarrollo de una depuración acelerada del alcohol. Cuando esto sucede, también se induce tolerancia cruzada a otras sustancias tales como anestésicos generales y otros depresoras del sistema nervioso central, entre las cuales las más frecuentemente vistas están los tranquilizantes y barbitúricos.

La dependencia que el consumo de alcohol produce, es tanto psíquica como física, las cuales tienen relación con los diferentes patrones de consumo que van desde la ingestión regular y diaria de grandes cantidades de alcohol, hasta largos intervalos de sobriedad mezclados con períodos de embriaguez cotidiana. En ambos casos, el sujeto tiende a incrementar paulatinamente la cantidad ingerida, y pese a sus esfuerzos de voluntad es incapaz de controlar la ingestión, empleando cada vez más tiempo en actividades relacionadas con la dependencia, evidenciando así el deterioro de su vida laboral y familiar, al igual que tolerancia a la ingestión y complicaciones físicas.

La interrupción repentina de la ingestión de alcohol puede producir síntomas como la ansiedad pronunciada, temblores, alucinaciones, y hasta convulsiones. Los efectos a largo plazo del consumo de grandes cantidades de alcohol, especialmente en conjunto con una nutrición deficiente, puede ocasionar daños permanentes a órganos vitales como el cerebro y el hígado. Además, las madres que beben alcohol durante el embarazo pueden tener hijos que presenten síndrome fetal de alcohol o que sufran de atraso mental u otras anormalidades físicas irreversibles. Las investigaciones indican asimismo que los hijos de padres alcohólicos corren mayor riesgo que otros niños, de convertirse en alcohólicos.

Cómo Actúa el Alcohol en el Cerebro

Primero veremos cómo se comunican las células del cerebro (neuronas), llamada neurotransmisión.

Diferentes partes del cerebro regulan distintas funciones. Primero se pueden observar las regiones cerebrales que controla tales cosas, como son: el movimiento, pensamiento, el juicio, la memoria, y “la gratificación”, o el sentimiento de placer que viene posterior al hacer algo agradable (saborear un pedazo de pastel, recibir una felicitación, etcétera).

1113631

Los científicos opinan que todas las drogas de abuso, como la cocaína, el alcohol, la nicotina, y la heroína, activan la senda de la gratificación cerebral.

Los investigadores todavía no están completamente seguros cómo se causa este aumento, pero una teoría sostenida es que causa que los conductos del ion permanezcan abiertos mucho más tiempo, así aumentando el flujo del ion. El resultado es un efecto tranquilizando mucho mayor en el cerebro. Debido a que existen receptores de GABA en muchas partes del cerebro, varias partes son afectadas. Esto causa el efecto sedante del alcohol en muchas funciones controladas por el cerebro –el juicio, el movimiento, e incluso la respiración.

Desgraciadamente, el uso prolongado del alcohol causa que el cerebro se adapte, para que dependa de la presencia de alcohol para funcionar normalmente. Después, si la persona deja de beber, él o ella experimenta ansiedad, nerviosismo, malestar emocional, insomnio, temblores, y en el alcoholismo severo, a veces convulsiones y/o muerte. Incluso mucho tiempo después de que la persona ha dejado de beber alcohol, las anormalidades cerebrales pueden continuar, causando sensación de incomodidad y anhelando más alcohol para relevar estos sentimientos. No consuma tanto alcohol apreciable lector… Todas estas adicciones ocasionan conflictos con la familia, generación de resentimientos, aislamiento, problemas emocionales, pérdida de la confianza y la autoestima,  problemas económicos, problemas legales, pérdida de la dignidad, lo más lamentable, recién leí el libro El señor de los cielos y menciona que no importa quien la consuma lo importante es enriquecerse y obtener millonarias sumas por este tipo estupefacientes.

Continuará…

Horizonte de Matamoros

Horizonte de Matamoros un medio independiente...